La Ciencia dentro de los planes de Gobierno de Barak Obama, novísimo presidente de los Estados Unidos de N.A., tiene nuevos visos, desde la declaración de Barak Obama al respecto "...Usaremos al sol, al viento, a la tierra para impulsar nuestros automóviles y hacer funcionar nuestras fábricas..." .
Prueba de esto es el nombramiento del Dr. Steven Chu, premio nobel de Física como Secretario de Energía, al Dr. John Holdren, físico de profesión, como Asesor principal en Ciencia y Tecnología, al Dr. Harold Varmus, premio nobel en Fisiología y medicina y le sigue una lista de prominentes científicos que soportaran las políticas en I+D del nuevo gobierno norteamericano.
Y como vamos en América latina, centrémonos mejor aún en América del Sur. La CEPAL publicó un artículo en diciembre del 2008, denominado "Capital de Riesgo e innovación en América Latina", donde el investigador Luis Felipe Jimenez muestra unas estadísticas sobre el tema e indica que: "Las estadísticas disponibles señalan que, en comparación con economías avanzadas y con las economías asiáticas de industrialización reciente, la región muestra un importante rezago en I+D. Como muestra el gráfico 1, en la mayoría de las economías incluidas la inversión en I+D es muy baja y no se observan incrementos significativos entre los dos períodos considerados. En la región, Brasil exhibe los mayores niveles de inversión en I+D, a considerable distancia de los países que le siguen: Chile, Argentina y México. A nivel global, son considerables los esfuerzos por incrementar la inversión en I+D que han desplegado China e India.
En los países avanzados, un promedio superior al 60% de la inversión en I+D es realizado por empresas privadas. En los países latinoamericanos para los cuales se cuenta con información, la mayor parte de la inversión en I+D es realizada por el gobierno o financiado por este, por las universidades y, en menor grado, por las empresas (ocde, 2007).1 Esto es indicativo de que las empresas de estos países han recurrido poco a estrategias de innovación para ganar competitividad frente al resto del mundo, y también que en ellos la estructura económica es menos compleja que en las economías avanzadas. En general, muchas de las innovaciones se efectúan dentro de empresas existentes. Aún más, suele suceder —sobre todo en las empresas grandes— que haya departamentos especializados que se dedican permanentemente a explorar nuevas ideas y la manera de aplicarlas a procesos productivos, estrategias de comercialización o productos comerciales nuevos o ya existentes. El gasto o inversión consiguiente forma parte de los planes de desarrollo de las empresas que, entre otras cosas, deben procurar el financiamiento apropiado. Al mismo tiempo, muchas innovaciones se traducen en la creación de empresas nuevas, ya sea porque algunas ya consolidadas o sus empleados deciden crear un vehículo separado para desarrollar innovaciones externamente, habida cuenta de su riesgo y rentabilidad esperada, o bien porque las innovaciones son el fruto de la acción emprendedora de agentes independientes. En estos dos últimos casos, una de las condiciones que hacen posible la transformación de una idea innovadora en un producto comercializable y por ende en la generación de los efectos positivos sobre el crecimiento ya mencionados, es la provisión de financiamiento con características adecuadas para superar las barreras al apoyo de la innovación."
Para la Red de Indicadores de Ciencia y Tecnología Iberoamericana e Interamericana (RICYT), los países de América Latina representan aproximadamente el 2% de la inversión mundial en I+D, África (0,3%), Norteamérica (39%), Europa (31%) y Asia (26%).
Aquí algunas cifras:
Argentina
Inversión en ciencia y tecnología (CyT):
Actividades científicas y tecnológicas US$ 964,275 millones
Investigación y desarrollo (I+D) US$ 845,172 millones
Porcentaje del PIB destinado a CyT:
Actividades científicas y tecnológicas 0,53%
I+D 0,46%
685 Doctores graduados el 2006
Brasil
Inversión en ciencia y tecnología (CyT):
Actividades científicas y tecnológicas US$ 9.932,4 millones
Investigación y desarrollo (I+D) US$ 7.290,2 millones
Porcentaje del PIB destinado a CyT:
Actividades científicas y tecnológicas 1,12%
I+D 0,82%
9.366 Doctores graduados el 2006
Chile
Inversión en ciencia y tecnología (CyT):
Investigación y desarrollo (I+D) US$ 633,656 millones
Porcentaje del PIB destinado a CyT:
I+D 0,68%
249 Doctores graduados el 2006
México
Inversión en ciencia y tecnología (CyT):
Actividades científicas y tecnológicas US$ 2.875,1 millones
Investigación y desarrollo (I+D) US$ 3.531 millones
Porcentaje del PIB destinado a CyT:
Actividades científicas y tecnológicas 0,37%
I+D 0,46%
1.910 Doctores graduados el 2006
Perú
Inversión en ciencia y tecnología (CyT):
Actividades científicas y tecnológicas US$ 700,6 millones
Investigación y desarrollo (I+D) US$ 100,5 millones
Porcentaje del PIB destinado a CyT:
Actividades científicas y tecnológicas 1,16%
I+D 0,16%
0 Doctores graduados el 2006
NOTA. No se consideran los doctores graduados en el exterior, solo los correspondientes a los programas doctorales dentro del país.
La innovación tecnológica viene incorporada muchas veces a los bienes de capital, por ejemplo el caso de la tecnología 3G en el Perú, esta se está imponiendo sobre la anterior existente por avance tecnológico, así los usuarios asimilamos tecnología de punta por saltos (al cambiar toda la infraestructura tecnológica anterior), a este proceso se le ha denominado leapfrogging, y ocurre también en las máquinas manufactureras, donde el cambio tecnológico es por saltos, también en los programas informáticos, donde adoptamos lo último en tecnología, por la aparición de nuevas facilidades, aunque no sea para nosotros necesaria, dejamos la que consideramos obsoleta y elegimos la mas avanzada (sin pasar por programas con avances intermedios).
El avance científico y tecnológico presenta lo que se conoce como Efecto de Agotamiento, esto es la acumulación de conocimientos hacen que el dominio del mismo se ahora mucho mas complejo que antes, debido al enorme instrumental existente y por lo tanto se hace cada vez mas profundo y avanzado el nivel de conocimientos que los agentes económicos deben asimilar.
Si recordamos las predicciones del ingeniero Gordon Moore (denominada la Ley empírica de Moore) decían que la potencia de los microprocesadores (el CPU, el "cerebro" de los computadores) se duplicaría cada 18 meses. Así el primer Microprocesador en 1971 (4004) contenía 2.700 transistores (válvulas de control electrónico dentro del microprocesador), el Pentium Pro (1995) 10.000.000 de transistores, el Itanium 2 en el año 2002 alcanzo la astronómica cifra de 220 millones de transistores y lo último en tecnología es el Intel Tukwila que poseerá internamente !2.000 millones de transistores¡ , entonces hay una tendencia en la denominada Ley de Moore donde efectivamente cada 20 meses vemos la duplicación de la capacidad de los microprocesadores, al punto en el cual el Software todavía no llega a alcanzar los avances del hardware.
El crecimiento económico está ahora asociado fuertemente al avance e innovación en tecnología, por ello no es ajeno al presidente B. Obama y así lo ha considerado en su plan de gobierno. Ojala nuestros presidentes fuesen mas visionarios y comprendan que mucho de los males como la pobreza, la desigualdad económica, el desempleo estructural, pueden ser mitigados con ayuda del avance tecnológico bien aplicado y no simplemente por la sustitución de la fuerza de trabajo, como actualmente se considera.