En 1961, el Profesor J. Forrester publicó un libro titulado "Industrial Dynamics" donde explica un fenómeno (Forrester effect) que tiempo después los empresarios denominaron Bullwhip effect.
Ahora en épocas de crisis financiera y con mercados inestables, el fenómeno toma cuerpo en algunos negocios donde la cadena de suministros puede ser quebrada.
La demanda de los consumidores en un mercado, no necesariamente es estable y puede ser estacional, esto obliga al productor a mantener una producción variable (algo complicado en grandes centros de producción) y un stock o inventarios en almacén, asumiendo el costo financiero de la inversión y tratando de que la rotación de estos activos sea la mas rápida posible.
Cuando los consumidores (down stream) aumenta su demanda, genera variaciones en los inventarios de los proveedores que podría dejarlos con stocks en negativo (pedidos en espera en el tiempo). Igualmente cuando los consumidores disminuyen la demanda, aumentan los inventarios afectando financieramente a los proveedores y en general a toda la cadena de suministro.
Para el profesor Forrester, este problema se debe a las fuerzas dinámicas del sistema económico, donde el pronóstico de la demanda varía de un distribuidor intermediario (agente entre el productor y el cliente) a otro. Algunos fabricantes tratan este problema bajo una política de asignación de cuotas de mercado, fijadas a base de incentivos (descuentos, premios, bonos; etc) que restringen la demanda intermedia u obligan a alcanzar cuotas de volumen a otros.
Entre las principales causas identificadas por los economistas que estudian este problema, están:
1) Fallas en el Pronóstico de la Demanda y la Información Parcial o asimetría de la información.
2) Los Tiempos de Suministro (Lead Time) y La Consolidación de Pedidos ( Batch Ordering) sin coordinación.
3) Alta volatilidad en las Fluctuaciones en los Precios y las Promociones ofrecidas por los distribuidores.
4) el fenómeno Shortage Gaming que consiste en aumentar los pedidos ante expectativas de desabastecimiento.
5) la reducción de la producción del fabricante.
Las empresas incurren en errores sistemáticos al asumir modelos históricos que suponen una demanda estática, cuyos incrementos son proporcionales, esto crea una miopía en la visión del mercado y generalmente se tienen fallas en el stock de inventarios, que afectarán a los agentes intermediarios y finalmente a los consumidores.
Como interviene la crisis financiera actual en reforzar el "Bullwhip effect".
Tanto la Producción como Inventarios en Almacenes, son valorados en términos nominales por las empresas, esta contabilización es el sustento del movimiento financiero de los productores y distribuidores; en la actual situación donde la restricción crediticia, afecta a productores (por ejemplo: Toyota, Nissan, Siemens, General Electric; etc. Están restringiendo las operaciones de sus plantas de producción) el suministro de bienes y productos tiene retrazos en las entregas, esto significa que el lead time ha aumentado en varias semanas, esto obliga al distribuidor local intermediario a aumentar sus Inventarios, pero no es posible debido a que los agentes financieros (bancos) les han restringido los créditos, aumentado los requisitos para acceder al crédito y sobre todo les interesan ahora los negocios como mayor liquidez (entiendase como negocios realizables en el corto plazo). Si bien en las actuales condiciones, donde los mercados de consumo disminuyes, sobre todo los mercados industriales y de equipos, aquellas empresas con planes de inversión y con provisión de capital planificada, encontraran problemas en el abastecimiento para la nuevas inversiones, resintiéndose también los mercados de reposición, obligandolos a aumentar los inventarios, para evitar paradas en sus operaciones, por falta de productos de reposición y mantenimientos.
Hay dos estrategias muy importantes en la cadena de suministro, que permite reducir el problema del Bullwhip effect:
Primeramente, está la denominada estrategia CPFR (Collaborative Planning, Forecasting and Replenishment). Se denomina de esta manera, a los planes y procesos de negocios desarrollados en conjunto por los miembros de la cadena upstream y downstream, donde el productor conoce las necesidades del cliente final, a través de los intermediarios. Se dice que la comunicación interactiva entre partes permite transferir pronósticos más precisos y las políticas promocionales de productos, para estabilizar los ratios de inventarios y de rotación de activos.
Segundo, la estrategia del control de inventarios en el punto de venta o VMI (Vendor Managed Inventory) donde es el Productor quien centraliza la información de la demanda y de los inventarios para monitorear el nivel "total" de inventarios de la cadena (almacenes del productor y de los distribuidores y del cliente consumidor) y decide sobre tiempos y cantidades de entrega. Esta estrategia, genera lo que conocemos "economías de escala" y reduce el lead time y los niveles de inventarios, pero a cambio aumenta el costo de la información, dado que requiere una completa integración a nivel informático y el uso de herramientas de gestión, así como de especialistas en el tema.