El asunto de la competitividad está ahora siendo analizado desde diferentes ángulos, mas allá de las fenomenales concepciones del "Guru" Michael Porter y su Obra "Competitive Advantage" (1985) , donde el Dr.Porter hace mención a las 5 fuerzas de su modelo de análisis estratégico como:
- Poder de Negociación de los Compradores y/o Clientes.
- Poder de Negociación de los Proveedores y/o Vendedores.
- Amenazas de los nuevos entrantes.
- Amenaza de los productos Sustitutos.
- La Rivalidad entre competidores.
Asimismo, el Dr. Porter considera que existen dos estrategias genéricas cuyos fundamentos se basan en conceptos microeconómicos, a saberse:
- Que los Servicios o Productos sean mas valorados que otros en el mercado (estrategia de Diferenciación).
- Que los Servicios o Productos sean considerados de menor Precio en el mercado (Estrategia de Costos).
"Competitive Strategy" (1080).
Pero los nuevos investigadores sobre la Competitividad van mas allá. Para Phillipe de Lombaerde, la competitividad tiene varias aristas como son:
– Crecimiento en competencia (internacional) mejorando los ingresos reales (La calidad de vida)
– Crecimiento en competencia externa con ganancias de productividad, cambio tecnológico y flexibilidad productiva (concepto primigenio de la competitividad)
– Crecimiento en competencia externa y sostenibilidad del crecimiento (enfoque desarrollista)
– Competitividad sistémica o estructural (Teoría sistémica)
– Competitividad como decisiones regionales de calidad (Concepción regionalista del desarrollo)
– Competitividad frente a Productividad (concepto microeconómico)
Siguiendo a Porter, la competitividad es inherente a las empresas y de esta se proyecta hacia la competitividad de las naciones, por ello es endógena al proceso económico de las empresas, asimismo la Competitividad sistémica, está orientada al estudio de las estructuras económicas (gobierno, finanzas, producción, etc.) que coadyuvan al logro del mejor desempeño (optimización) de las organizaciones en los mercados.
¿Puede ser la falta de competitividad un asunto estructural?
Recordemos que la estructura económica consiste en varias dimensiones de análisis como son:
- De composición social
- Tecnológica
- Temporal
- Material
- Espacial o geográfica
Así englobamos a las relaciones de Producción, de consumo, de trabajo, institucionales, etc como el conjunto de relaciones que constituyen la estructura económica de un país.
La falta de competitividad desde el enfoque estructuralista (Dr. Raúl Prebish y otros) como parte de la falta de desarrollo, estaría relacionada con el deterioro de los términos de intercambio, contrariamente a la concepción clásica de las ventajas comparativas (concepción ricardiana); así bajo ciertas condiciones de la estructura económica, es posible que la competitividad no encuentre un camino libre para desarrollarse y así los estructuralistas plantean que el desarrollo viene entonces del despliegue de una industria local con proyección hacia el mercado internacional (sustitución de importaciones), dado que los mercados internacionales son asimétricos. Sin embargo debido al fenómeno de la globalización, los mercados tienden a ser mas abiertos a producciones externas y buscan la optimización estratégica (tal como lo señala el Dr. Porter), generando una corriente positiva que mueve el "espíritu innovador" del productor local y con ello mejora su competitividad en los aspectos arriba mencionados, sin embargo no hay evidencia que pruebe que la competitividad dependa de hecho, de aspectos puramente estructurales.
De hecho la concepción de la competitividad sistémica, aborda el análisis de la competitividad como la creación de una estructura económica desde su visión estratégica a largo plazo (planificación estratégica) logrando la optimización de sus procesos y finalmente esto la hace competitiva y a la vez sostenible en el tiempo. Entonces no sólo le compete a la empresa misma, sino que entra en juego una institución en calidad de árbitro: el Estado, para colaborar en la implementación de los medios y recursos que permitan alcanzar una estructura económica sostenible para la competitividad, así la creación de infraestructura, de marcos legales y de estabilidad democrática, constituyen pilares para conseguir logros en términos de la competitividad empresarial, si estos cumplen con lo indicado en la concepción sistémica de esta.